Hay que pensar que al prohibirla le estamos quitando el derecho a muchas personas de su libertad para elegir sobre su vida y al derecho de elegir lo que cree que es mejor para ella. Hay que pensar que se tiene que estar pasando muy mal y sufriendo mucho para que una persona llegue al límite de querer quitarse la vida, pero hay que ser realista, la vida es así de dura y hay veces que castiga a personas como Chantal, que sin hacer ella nada ni tener culpa de nada se encontró con este cáncer que le había arruinado la vida. Es justo que si una persona se encuentra en esta situación tenga el derecho y la libertad de decidir si quiere acabar con este sufrimiento aunque para ello tenga que llegar a verse en el compromiso de acabar con su vida para terminar con él.
Otra pregunta que también nos deberíamos hacer es esta otra: "¿ Deberíamos tener en cuenta la opinión de la persona que está sufriendo?". Hemos observado una entrevista en la que Chantal contaba como se sentía y sus razones para querer recibir la eutanasia, en dicha entrevista afirmaba que se sentía literalmente devorada por el dolor y que pensaba acabar con su vida porque ya no podía más, ya que, se dio cuenta que ya no podía hacer nada para poder detener el tumor, pero que desde el día de todos los santos fue cuando lo deseaba más, pues fue el día que perdió la vista.
Después de leer esto estamos más convencidas de que se debería legalizar la eutanasia y creemos que más de uno de vosotros también, puesto que, debe de ser muy duro estar pasándolo tan mal, sufriendo y además saber que hagas lo que hagas no puedes hacer nada para evitar que siga avanzando y, ¿quién sabe?, cada vez sufriendo más.
Vanessa Muñoz Pérez.
Débora García Portillo.
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